Antes de leer estas letras, haga un ejercicio sincero: olvide su nivel intelectual, su carrera, su cargo, su nivel económico, su trabajo precario o fijo, su capacidad de movimientos, su Ser habitual y cotidiano. Discapacítese por un momento e intente ponerse en lugar de nuestros hijos.

El pasado 17 de enero de 2013,  la Dirección General de Personas con Discapacidad y Dependencia resolvió, con carácter “vinculante”para todo el sector de la Discapacidad, un recorte para 2013 en un porcentaje del 9%, sobre el presupuesto de 2012.

Todo esto se decide sin contar con todas las Entidades del Sector y además con la desfachatez de disfrazar el recorte bajo el más que sospechoso concepto de “coparticipación global de los usuarios en la financiación del coste del servicio por su atención”. Vamos, que cada familia se apañe con los costes. El que pueda pagar que pague. El que no, que deje a su hijo en casa de cara a la televisión.

Aceptar este recorte insultante de nuestros irresponsables políticos no solo es una temeridad sino que además supone una “sentencia de muerte para el sector”, para las Entidades que atendemos a los Discapacitados de la Comunidad Valenciana y, por supuesto, un atentado a la precaria economía de las familias de los usuarios.

El Sector de la Discapacidad es uno de los Sectores más débiles de nuestra Sociedad, por lo que necesitamos tu colaboración y la de todos los medios de comunicación para dar cobertura a nuestras reivindicaciones. Nos gustaría contar contigo.

Somos Centros de Atención Temprana, Centros de Educación Especial, Centros Ocupacionales, Centros de Día para los usuarios más afectados, Viviendas tuteladas, Residencias, Clubs de ocio, Centros de Empleo protegido y un largo etcétera.

Las Asociaciones y Federaciones del Sector  han realizado a lo largo de los años un gran trabajo y su larga trayectoria ha sido fundamental para el avance en derechos y servicios de las personas discapacitadas. Pero ahora, a mi juicio, muchas de las siglas ya no nos representan.

Sin embargo, los trabajadores del Sector y los voluntarios son el  más preciado activo con el que cuentan las Entidades, sin olvidarnos del activo más importante: nuestros discapacitados.

La situación actual es suficientemente crítica como para aunar todos los esfuerzos, conjuntar todos los intereses y hacer frente común. Todos somos el Sector de la Discapacidad.

Los presupuestos de la Generalitat para el presente ejercicio 2013, suponen para las Entidades una disminución de subvenciones que nos obligará  a elevar las cuotas de los padres a cifras elevadísimas , o bien al despido de profesionales que atienden a nuestros hijos de forma impecable.

A este desastre se une la “crisis/estafa del país”, los  recortes de las prestaciones de dependencia y la no  gratuidad de los fármacos.

Muchos de nuestros hijos tienen graves dificultades para realizar las actividades básicas de la vida diaria,  por lo que los centros a los que acuden y los profesionales que los atienden son esenciales e insustituibles.

El Gobierno Autonómico se jacta de dialogar con nuestro sector, pero esto es simple y llanamente falso.

La Consellería de Bienestar Social nos adeuda más de 15 millones de euros del año 2012, a lo que hay que sumar las deudas de las Consellerías de Educación, Sanidad o Empleo. Estos retrasos han puesto a la inmensa mayoría de las entidades al borde del colapso.

Las entidades se han visto abocadas a un mayor endeudamiento por las pólizas de crédito firmadas y agotadas, situación agravada por intereses bancarios y por los recargos derivados del aplazamiento de las cotizaciones a la Seguridad Social, el IRPF de nuestros trabajadores. Por supuesto hay que añadir nuestro endeudamiento con proveedores.

Los primeros y mayormente afectados han sido nuestros trabajadores, que han seguido trabajando normalmente incluso sin cobrar y, por supuesto, sin percibir intereses de demora cuando cobraron.

Todas las entidades están asfixiadas. Algunas se ven obligadas a cerrar los centros de atención a personas con discapacidad.

Como padre y además como Familia de acogida de un menor discapacitado en un 80%, exijo:

  • El pago inmediato a todos los centros y servicios del sector de la Discapacidad por parte de todas las Consellerías que nos adeudan de los ejercicios 2011 y 2012: Bienestar Social, Sanidad, Educación, Empleo…. Esto no les debe resultar complicado a la vista de la rapidez con la que han asumido los pagos al mundo del fútbol, las grandes obras, los aeropuertos sin aviones y con conejos invasores y los circuitos  y barquitos de vela absurdos.
  • Un plan extraordinario por parte de la Generalitat Valenciana para financiar a nuestras entidades de forma estable y suficiente para mantener la calidad de nuestros servicios.
  • Pago lineal y en los plazos establecidos puesto que los trabajadores no están dispuestos a seguir financiando el Sector como han venido haciendo durante meses sin recibir siquiera los intereses de demora de sus sueldos retrasados o no percibidos.
  • Que mis políticos reconsideren el despropósito que han ocasionado con los recortes a las personas dependientes.
  • Quítense de encima la vergüenza de no dotar a las personas que más lo necesitan de las medicaciones necesarias.

La Generalitat Valenciana, capaz de invertir millones de euros en insultos a nuestra inteligencia, “pasa sin pudor” de los principios de actuación establecidos en la Constitución y en el Estatuto de Autonomía.

Apelo a lo que les pueda quedar de conciencia y honor.

No vamos a permanecer impasibles mientras una sola persona con discapacidad se encuentre en una situación que le aboque a la marginación o a la pobreza.

Nuestros mayores sabiamente nos educaron en la máxima de que el respeto es lo último que se pierde. Pero el respeto también hay que ganárselo. Nosotros ya no les tenemos ni miedo, ni respeto, porque de un plumazo están matando el Bienestar Social y provocando lo que en términos sofisticados se llamaría proceso de Involución. En lenguaje llano: ir para atrás.

Lo último que se pierde es la capacidad de lucha.

Cuando el Bienestar Social muere, queda la Asistencia Social, herida también de muerte por los gobernantes. Estamos a un paso de la Beneficencia y si, nadie lo remedia, pronto nos veremos abocados a la caridad mal entendida, a la limosna y a la imagen de Los Santos Inocentes, en la que un Discapacitado intelectual vive de la carroña de su cacique.

Desde luego, quienes nos gobiernan no son ni santos , ni inocentes. Saquen sus propias conclusiones.

Es evidente que mi hijo es discapacitado, puro y auténtico. Pero… cuidado. No es idiota.

He encontrado pictogramas ( imágenes que usamos para comunicarnos con nuestros hijos), suficientes para  expresar, enfado, recorte…., pero no he encontrado ninguno para explicarle a mi nene que sus mandatarios en Valencia no encuentran dinero para su bienestar y si para la compra de un campo de fútbol.

Bueno… quizá me equivoque. Seguro que algún pictograma significa ladrón, pero no quisiera utilizarlo. No me obliguen.

(*) Javier Garcerá Osca es padre de un niño discapacitado

Publicat:

http://www.cuartopoder.es/invitados/la-comunidad-valenciana-abandona-a-los-mas-debiles-los-discapacitados/1613